Piedra de Toque

Los trabajos para la “recuperación de la memoria documental de los maestros fundidores de campanas. Patrimonio en riesgo”, en el municipio de Yauhquemehcan, dieron inicio formalmente con la ceremonia de entrega-recepción de documentos para tal proceso, a cargo del Centro INAH Tlaxcala (CIT) y la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH).

Durante el proceso que da seguimiento a una primera reunión de la segunda etapa del proyecto “Rutas y sendas de seguimiento a las declaratorias y planes de salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial de Tlaxcala”, del INAH en la entidad, el director de esta dependencia federal, José Vicente de la Rosa Herrera, subrayó la importancia de reconocer el origen de esos elementos emblemáticos, de los antecesores de los actuales maestros fundidores y del gran interés del presidente municipal de Yauhquemehcan, David Vega Terrazas, por destacar y promover el valor de este oficio ancestral, así como la promoción turística que generará, como lo anunció el secretario de Turismo del estado, Fabricio Mena Rodríguez, también presente.

Con la confianza explícita en que el proyecto llegará finalmente a buen puerto, De la Rosa identificó a los invitados especiales como testigos de honor del acto que “dará nuevo impulso y resguardará la historia de las campanas de Ocotoxco”, bajo el acompañamiento de la Escuela Nacional de Antropología e Historia en el trabajo de campo.

Francisco Chimal Chimal, Gaspar y Eduardo Sánchez García y Demetrio Hernández Nava, con sus familias, son los primeros documentadores del patrimonio cultural de Ocotoxco, a través de sus archivos personales, que van desde facturas, hasta imágenes y reconocimientos por las campanas elaboradas dentro y fuera del país.

El acto fue testificado por la directora ejecutiva del Archivo de la Palabra, Montserrat Rebollo Cruz, quien llevó a cuestas la primera etapa del proyecto, con un plan de salvaguardia urgente en la fundición de campanas de Ocotoxco, como resultado en 2023, dentro del mismo proyecto, hoy a cargo de Heberto Ríos Aquino, titular de Resguardo de Bienes Culturales del CIT, hecho que garantiza el buen puerto de este nuevo proceso.

El resguardo, que consiste en limpieza, protección con guardas, documentación y digitalización de los documentos, dará forma al acervo documental que revalorará el oficio y herencia ancestral e identidad a sus nuevas generaciones y a la comunidad en general.

El documento final que se entregará en diciembre próximo, al igual que la devolución de archivos en préstamo, sumará también a los acervos del Centro de Documentación Ángel García Cook, del Centro INAH, en la “sede” de la Secretaría de Cultura federal, para la consulta pública y se articulará con académicos, investigadores y estudiantes de etnohistoria de la ENAH, como se encargará María Guadalupe Rodríguez Espinoza, profesora de asignatura.

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